Facundo Cabral durante su última visita a Los Angeles. |
Esta mañana amaneció con la devastadora noticia del asesinato del maestro Facundo Cabral… Uno se pregunta: ¿Por qué? ¿Por qué le sucede esto a un ser humano que dedicó su vida a cantarle a la paz, al amor y a la vida?
Pero más que resentimientos, vamos a recordar algunas de sus reflexiones:
“La vida no te quita cosas: te libera de cosas... te aliviana para que vueles más alto, para que alcances la plenitud. De la cuna a la tumba es una escuela; por eso, lo que llamas problemas, son lecciones. No perdiste a nadie: El que murió, simplemente se nos adelantó, porque para allá vamos todos. Además, lo mejor de él, el amor, sigue en tu corazón. ¿Quién podría decir que Jesús está muerto? No hay muerte... hay mudanza. Y del otro lado te espera gente maravillosa: Gandhi, Miguel Ángel, Whitman, San Agustín, la Madre Teresa, tu abuelo y mi madre…”.
Querido poeta, que tengas un reencuentro eterno con tus seres queridos y tus ídolos, nosotros nos quedamos con tus poemas, canciones y lecciones, simplemente te nos adelantaste.
Y ahora podemos decir como también destacabas en tus presentaciones: “NO ESTAS MUERTO, SOLO ESTAS DORMIDO”.
La vida se encargará de las personas que en Guatemala le quitaron la vida a Cabral.
El cantautor argentino fue muerto a tiros el sábado 9 de julio por la madrugada en una emboscada en ese país donde ofreció dos presentaciones, el martes y jueves, y al finalizar se dirigía del hotel al aeropuerto internacional para viajar a Nicaragua cuando su vehículo fue acribillado.
¿Maestro? ¿Poeta? ¿Filósofo?... Cada una de estas palabras describe la obra de Cabral y de una u otra, siempre es en una forma inspiradora. Como la clara verdad de sus palabras y el fuego de su presencia, que quizá en un tiempo quemaba y que ahora, desde el cielo, felizmente ilumina...
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